Los oficiantes

Manto de la cultura Paracas. Los oficiantes eran enterrados con sus mantos porque nadie más que ellos podían usarlos ya que el dibujo del manto lo define en cuanto a sus antepasados y espíritus asistentes.
Todos los pueblos originarios tenían su oficiante, su maestro, sabio, profeta. En las altas culturas, que construyeron centros ceremoniales los oficiantes tenían vestimenta que exhibía las imágenes de los diferentes seres sobrenaturales (ancestros fundadores del linaje), y otros atributos como águilas, pumas, peces, serpientes, etc.

En la cultura Tiwanaco, Nazca, Paracas, estos oficiantes eran guerreros del más alto estatus y formaban parte de la élite gobernante.